Con esta oración cerraremos nuestro aura para que ninguna energía externa nos afecte negativamente.

Yo, (repita su nombre),
en este momento
cierro mi aura
mis puertas astrales
las de mis seres queridos
mi pareja, mis hijos,
mis padres, mis hermanos,
mis amigos, las personas
con las que trabajo y todas
con las que me relaciono ahora o que lo haya hecho
en cualquier otra historia mía, a toda creación, deseo
o circunstancia humana
que venga a nosotros con intenciones de dañarnos, obstaculizarnos,
vigilarnos, molestarnos, perturbarnos o controlarnos.
Cierro mi aura y mis puertas astrales a todo ser encarnado o desencarnado,
a toda entidad o espíritu, demonio, ser elemental, o energía interferente,
que venga, hayamos atraído, o haya sido enviada a nosotros con intenciones de dañarnos,
controlarnos, obstaculizarnos, vigilarnos, molestarnos, perturbarnos o enfermarnos.
Y establezco que desde mi parte divina y de acuerdo con la parte sabia
y divina de todas las personas que he mencionado directa o indirectamente,
es nuestro deseo que nuestras auras y nuestras puertas astrales quedan abiertas a todo lo que es bueno y positivo.
Quedamos abiertos a la armonía, al amor, a la paz, a la salud, a la sabiduría,
a la prosperidad y quedamos protegidos por nuestros Ángeles Guardianes, así como por nuestros guías y protectores durante las siguientes 72 horas.
Agradezco y bendigo nuestras vidas en el nombre de lo más sagrado.
Gracias Padre-Madre Divino porque esto ya está hecho.
Así sea.